Lakshmi Maye

Itinerante: El alma que no se queda quieta

Hay palabras que se me quedan pegadas en la piel. Itinerante es una de ellas.
No es solo alguien que viaja. Es alguien que se mueve con sentido, con hambre de alma, con pies que preguntan y ojos que no se cansan de mirar.

Yo me siento así. No porque recorra el mundo entero, sino porque cada lugar que visito me cambia un poquito el mapa interno.

En Santo Domingo, República Dominicana, aprendo a soltar. Entre su ritmo, su sol y sus playas, me reencuentro con una risa más ligera. Desayuno mangú, escucho risas que parecen de gente que me conoce de toda la vida. Me dejo llevar.

En Brasil, escucho un susurro profundo en forma de historia. Llego a Sao Sebastião y es perfecto. El mar y la arquitectura colonial conviven como si siempre hubieran estado esperando. Camino por sus calles y siento que cada una guarda un relato. Es como hojear un libro abierto bajo el sol.

Nueva York me muestra sus mil caras. Rascacielos, trenes, luces, ruido. Pero en medio del caos, aparece el ashram. Un espacio de silencio en la ciudad que nunca duerme. Medito mientras el mundo corre afuera. Respiro luz entre concreto. Y aprendo que el contraste también es hogar.

En Madrid, España, camino como si viviera dentro de un cuento de pasta dura. Las calles de piedra, los balcones con flores, la comida sencilla y llena de alma. Me dejo abrazar por la historia, por los silencios largos, por la belleza que no se esfuerza.

Portugal, en Aveiro me susurra despacito. Me enamoro de sus colores suaves, de sus cuestas y sus balcones con ropa colgada. Pruebo pasteles de nata sin culpa. Camino sin prisa. Me enseña a estar. A simplemente ser.

Ser itinerante no es solo cambiar de lugar. Es dejar que cada sitio me transforme.
Llevo en la maleta algo más que ropa: historias, heridas, aprendizajes, preguntas, despedidas y sueños.

Y aunque a veces no tengo claro el rumbo, sé que el alma que se mueve, se expande.
Y eso, para mí, es trascender.

EligeTuDestino #Itinerante #ViajarConSentido #MayeLakshmi #ViajesQueSanan

Por: Maye Padilla (Si vas a copiar, al menos dame el crédito)

Salir de la versión móvil